La moneda argentina más buscada: puede estar perdida en un cajón y valer hasta USD 1.250
Guardadas entre viejos objetos en cualquier hogar, estas monedas son las más codiciadas por coleccionistas y numismáticos en Argentina. Un error de acuñación las hizo únicas y valiosas, con precios que llegan a rozar los 1.500.000 pesos Los errores en la acuñación de monedas pueden transformar objetos cotidianos en piezas codiciadas. Este es el caso de las monedas híbridas o monedas mula de Argentina, un fenómeno que surgió a finales de la década de 1970. Estas monedas de 100 pesos Ley, acuñadas en los años 1978 y 1979, se destacan por su combinación incorrecta de diseños en el anverso y el reverso. Este error las convirtió en un tesoro para los coleccionistas, alcanzando valores que van desde USD 600 hasta USD 1.250 según su rareza.
Origen de las monedas híbridas
En 1978, la Casa de la Moneda decidió incluir un diseño especial en conmemoración del bicentenario del nacimiento de José de San Martín. Las monedas de 100 pesos de ese año llevaban la efigie del prócer en el reverso y, junto a ella, las fechas “1778-1978”, un homenaje al aniversario. Este diseño especial se utilizó exclusivamente durante ese año.
En 1979, la Casa de la Moneda dejó de usar este diseño y regresó a un modelo más sencillo. En lugar de las fechas conmemorativas, junto al busto de San Martín aparecía una rama de laureles, mientras que en el anverso se mantenían el valor nominal y el año de emisión. Sin embargo, debido a una confusión o error en la acuñación, los cuños de diferentes años y diseños se mezclaron, dando lugar a dos versiones únicas de monedas híbridas.
Estas monedas híbridas, también conocidas como “mulas”, presentaban una combinación inesperada de diseños. Por ejemplo, una moneda podía tener en un lado la fecha de emisión de 1978 y, en el otro, la rama de laureles que debía usarse solo en 1979. Otra versión mezclaba la fecha de emisión de 1979 con las fechas conmemorativas del bicentenario de San Martín, que debían haberse utilizado exclusivamente el año anterior.
Características de las monedas híbridas
La rareza de estas monedas híbridas radica en su combinación de diseños incorrectos, resultado del uso accidental de cuños que no correspondían al mismo año. Estas son las dos versiones principales:
Moneda híbrida de 100 pesos Ley con el año 1978 y laurel junto a San Martín:
En el anverso: valor nominal (100) y año de emisión (1978).
En el reverso: busto de San Martín acompañado de una rama de laureles.
Valor estimado: USD 600.
Ambas monedas, aunque fueron acuñadas en 1979, tienen diseños que representan un error en la producción. Estas piezas salieron a circulación de forma normal, lo que explica por qué aún pueden encontrarse guardadas en cajones o cofres familiares.
Hipótesis sobre su origen
Existen varias teorías sobre cómo se produjeron estas monedas híbridas. Una de las hipótesis plantea que, en 1979, se confundieron los cuños mientras se completaban pedidos pendientes de acuñación. Otra teoría sugiere que pudieron haber sido producidas como un souvenir durante una exposición en la Sociedad Rural, donde la Casa de la Moneda participó mostrando su maquinaria. Incluso se especula que un empleado pudo haber creado intencionalmente estas rarezas para beneficiarse del alto valor que alcanzarían en el futuro.
A pesar de las teorías, no hay una respuesta definitiva sobre su origen. Sin embargo, lo que está claro es que estas monedas únicas en su tipo capturan la atención de coleccionistas y especialistas en numismática tanto dentro como fuera de Argentina.
Mercado y valor actual
El mercado de las monedas híbridas en Argentina no es tan activo como los mercados financieros, pero sigue generando interés entre los coleccionistas. Los precios de estas piezas varían según su rareza y estado de conservación. Las monedas híbridas más comunes, como las que llevan la fecha de 1978 con la rama de laureles, han sido vendidas en subastas por USD 600, lo que equivale a $695.055 al tipo de cambio dólar MEP actual. En contraste, la versión más rara, que combina la fecha de 1979 con las fechas conmemorativas del bicentenario, alcanza valores estimados de USD 1.250, es decir, aproximadamente $1.448.637,5.
Sin embargo, encontrar compradores dispuestos a pagar estos precios no es fácil. En muchos casos, los vendedores recurren a casas de numismática, que suelen ofrecer montos menores a los de las subastas con el objetivo de obtener una ganancia en futuras ventas. En este contexto, los precios de compra pueden bajar entre USD 200 y USD 300 respecto al precio máximo estimado.
Riesgos de falsificaciones
El alto valor de estas monedas ha llevado a la aparición de imitaciones. Algunas personas intentan crear versiones híbridas cortando monedas originales y ensamblando las mitades de distintas piezas. Afortunadamente, estas falsificaciones son fácilmente identificables, ya que el canto de la moneda muestra claramente el corte. Los coleccionistas experimentados y las casas de numismática cuentan con herramientas y conocimientos para verificar la autenticidad de estas piezas.
Detalles adicionales sobre el mercado
Aunque algunas de estas monedas pueden alcanzar hasta $1.448.637,5 al tipo de cambio dólar MEP, no siempre es sencillo lograr ventas a estos precios. Plataformas como Mercado Libre también cuentan con versiones en venta, pero los especialistas advierten sobre la necesidad de verificar la autenticidad de las piezas antes de realizar cualquier compra.